Lo que me cuesta explicar a los alumnos que no todo es opinable. Que si tú opinas que la tierra es plana, o que el 5G te instala virus, es que eres gilipollas.
Lo que tienes que hacer si piensas eso, es plantear una hipótesis, estudiarla, demostrarla, compartirla y defenderla. Si yo puedo replicar tu experimento y obtengo los mismos resultados que obtuviste tú, entonces estarás en lo cierto. Pero no será por tu opinión, sino por tu investigación.La estupidez y memez de respetar opiniones y ofensas, han permitido que rastrojos humanos como el imbécil de Iván Espinosa Monteros se dedique a violar las matemáticas cuando intenta hablar de estadísticas y que su ristra de gilipollas de seguidores le aplaudan con las orejas.
Una sociedad de subnormales a elección propia que se dedica a negar el holocausto, a negar las vacunas, a decir idioteces mientras tienen en su corrupto bolsillo un dispositivo que les permite acceder a toda la cultura de la historia de la humanidad.
A ese punto de subnormalidad por devoción hemos llegado. Excrementos con corbata.
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